(LA PANDEMIA DEL) COVID 19 Y LA REINVENCIÓN DE LA PRODUCCIÓN MUSICAL EN BOLIVIA
¿Qué ha ocurrido con la música del país durante la pandemia del Covid 19?
El aislamiento ha sido un punto de reconfiguración de perspectivas para productores y músicos bolivianos. Conversamos con distintos personajes de la producción y difusión musical acerca de este reinicio en la música boliviana.
“Un balde
de agua fría”
La cuarentena rígida producto de la pandemia fue un parón repentino para el equipo de So Fresh, quienes comenzaron con esta productora en Enero de 2020. Las expectativas para Fernando Urquidi, productor de música urbana y cofundador de SoFresh, fueron afectadas por el dictamen de cuarentena rígida. Luego de haber realizado una inversión importante para lanzar su proyecto con mucha ambición, la cuarentena “fue como un balde de agua fría”, dice Effer (Fernando Urquidi).
Algo parecido le sucedió al productor audiovisual Rxockie, que se dedicaba a la fotografía comercial, de pronto se vio imposibilitado de salir de su casa para tomar fotografías. Tanto él como Effer superaron el shock del aislamiento repentino y decidieron trabajar desde casa y recalcular sus dinámicas de trabajo para los próximos meses. Effer trabajó en beats utilizando instrumentos digitales desde su estudio mientras Rxockie se ocupó de investigar y estudiar los histogramas de distintas producciones en imagen y video.
Rxockie y SoFresh se encontraron para trabajar en los videos “Pecado” de Ceskyboy y “Sola – Remix” de Adely, ambos artistas parte de SoFresh. Para eso, tuvieron que sortear varias dificultades, desde la disponibilidad de locaciones, participantes de la producción diagnosticados con Covid y la regulación del horario de tránsito permitido en la ciudad y costos extra para cumplir con las medidas de bioseguridad.
En ambos videos se aprovecha una estética pulida en la fotografía, planos cerrados y la iluminación diseñada para esos espacios limitados. Fernando comenta que SoFresh se lanzó para poder producir a un nivel profesional y estar a la altura del nuevo movimiento que ha surgido en Santa Cruz desde el género urbano. También, decidieron invertir en activaciones de marketing para el lanzamiento de los videos con paquetes temáticos que enviaron a influencers relevantes en Santa Cruz.
El momento del videoclip
Como en el caso de las producciones de SoFresh en colaboración con Rxockie, el videoclip musical ha sido la punta de lanza para difundir el trabajo de los músicos del país. La presencia del público en redes se ha duplicado como menos y la interacción con los contenidos también ha crecido mucho durante la pandemia. Sobre todo, los videoclips de las producciones de género urbano en Santa Cruz han aprovechado este momento y sus videos han llegado al reconocimiento internacional gracias a la cobertura de las “reacciones” de youtubers de distintos países de la región. Tal como hay creadores de contenidos especializados en contenido urbano como el hip hop, que revisan tanto las producciones musicales como los videos, estas plataformas también existen en menores medidas para otros géneros musicales.
El soporte audiovisual se convirtió en el sustituto de la presentación en vivo. La producción de videoclip y la transmisión en vivo son los medios a explotar en este momento, así lo entendieron los organizadores de los espacios de difusión“Sonidos de Acá” y “La Otra Vereda”, que lanzaron dos proyectos de difusión enfocados en los medios digitales y en el video como soporte.
Pato Peters, gestor cultural paceño, comenzó el Podcast “Sonidos de acá” basada en su playlist “Top 200 Bolivia – Rock y Pop (2000-2020)”, con 10 episodios dedicados a repasar las 100 primeras canciones, reseñar producciones musicales recientes y lanzar el Homenaje al Rock Boliviano para el 6 de Agosto, donde Peters invitó a cincuenta músicos entre bandas y solistas para que ellos realicen un cover de otra banda boliviana. El producto fue publicado entre las 11 y las 19 del feriado de 6 de Agosto y los posteriores episodios del Podcast se dedican a hablar de cada uno de los covers realizados. En este proyecto participaron bandas emergentes junto a varias bandas consolidadas.
Por su parte, La Otra Vereda se alió con la Fundación Viva para lanzar el concurso “Elabora tu video en cuarentena” para que bandas emergentes concursen por un premio que incluye la grabación de tres canciones y la difusión de las mismas. 50 bandas mandaron sus videos para el concurso y los ganadores se escogieron por las bandas que más “me gusta” obtuvieron en sus videos y por las calificaciones de un jurado especializado.
En ambos casos, la realización de videos muestra cómo las bandas aprovechan los recursos para realizar sus videos, ya sean videos realizados con celulares hasta videos que se hicieron con apoyo de productores audiovisuales profesionales.
Por su parte, para aprovechar las transmisiones digitales sincrónicas, el músico paceño de género electrónico, Pablo España organizó una serie de Raves virtuales a través de la plataforma Zoom. España se dedica a producir y crear música electrónica y durante la pandemia también saco provecho de la oportunidad para terminar su disco “Sensitive”, disponible en Spotify, junto a un video promocional para su canción Closed Eyes, realizado durante la cuarentena también.
La oportunidad de
“hacerlo uno mismo”
Participantes del concurso como Adriana Justiniano de al banda Roberto Ayawaska o Carlos Achá de Liláh (Liláh realizó un cover del solista Ionse para “Sonidos de acá”), han notado la dinámica y el valor del trabajo visual y mediático que complementa a la música. El video de Roberto Ayawaska aprovecha tomas realizadas por miembros y amigos de la banda para el montaje mientras que Carlos se enfocó en crear una textura para el video durante la edición, aprovechando la relevancia de la estética glitch y VHS en el video contemporáneo.
El soporte audiovisual se convirtió en el sustituto de la presentación en vivo. La producción de videoclip y la transmisión en vivo son los medios a explotar en este momento, así lo entendieron los organizadores de los espacios de difusión“Sonidos de Acá” y “La Otra Vereda”, que lanzaron dos proyectos de difusión enfocados en los medios digitales y en el video como soporte.
Pero, también los músicos han elaborado estrategias para mantenerse en contacto con su público, ya que la pandemia evita que se encuentren en los escenarios. Los Vagabundos Espaciales, banda compuesta por Eduardo Torrico, Einar Zeballos y Antonio Elías, comenzaron una serie de transmisiones en vivo como plataforma para conversar en grupo con amigos suyos y posteriormente con seguidores de su música. Así, de semana en semana comenzaron a estructurar una dinámica que resultó en “Radio Vagabundo”, un espacio donde los miembros de “Los Vagabundos” entrevistan a productores y músicos de trayectoria para compartir sus experiencias en una transmisión en vivo. Las transmisiones alcanzaron un público considerable en las entrevistas que realizaron a Daniel Zegada “Zegadex” o José Alberto “Pepe” Morales de “La Logia”. Pato Peters comenta que los lives no son una costumbre para los músicos bolivianos, ni en el caso de músicos reconocidos como la cantante y vocalista de Efecto Mandarina, Vero Pérez, que según Peters realizó una transmisión en vivo por primera vez durante la cuarentena.
Renacimiento de la música boliviana
Este reajuste en la manera de mantenerse vigente en la mente de la audiencia del país, junto al aumento en el tiempo que todos pasamos en internet, han resultado en una reinvención de la música boliviana. Todos los entrevistados concuerdan en que las perspectivas y la imagen que tiene el público de la música boliviana es distinta desde la pandemia. Quizá sea la búsqueda colectiva por el alivio en el arte la que resultó en los descubrimientos de nuevos artistas, pero las maneras que los músicos y productores han adoptado para difundir su música es igual de importante.
Pato Peters, que es un gestor cultural de larga trayectoria, dice que la difusión siempre ha sido el punto más flaco de todo el aparato de la música boliviana. El trabajo de la imagen de los músicos, la interacción, los productos permanentes en el tiempo como el videoclip. La necesidad ha llevado a muchos artistas a ocuparse de su imagen y su interacción autor-consumidor con mayor dedicación. Esta experiencia puede ser el giro que redefina la música boliviana y potencia la nueva camada de músicos en distintos géneros.
SOBRE EL AUTOR
Camilo Agramont
Artículo parte del proyecto escribamos en cuarentena.